El nuevo ministro de Cultura, César Antonio Molina, afirma, así como quien no quiere la cosa, que existe, aunque no se haya hecho pública, una propuesta concreta sobre el canon digital.
Y si esto fuera insuficiente para ponernos de los nervios, asegura que esta propuesta se está estudiando junto con las entidades de gestión (SGAE & Cia) para su redacción final. Una cosa es saber que, en este bendito país, las cosas están así, que esto tenia que haber pasado, en realidad, hace meses, y otra, muy distinta, que te lo suelten de golpe, en plena depresión postvacacional y sin anestesia.
Lo curioso del tema es que de la otra parte implicada, los fabricantes de los dispositivos catalogados de utensilios aptos para actividades delictivas, no se dice ni pío, lo que implica que, si no han protestado por esa omisión, es que ya han sido consultados y están de acuerdo con el borrador actual, al igual que lo está, según palabras del ministro de Cultura, el de Industria, Joan Clos.
Sin que haya trascendido absolutamente nada del contenido del proyecto, solo podríamos decir de él vaguedades e incongruencias, pero de eso ya se ha encargado el ministro: La propuesta actual en discusión está diseñada para que "consiga el equilibrio necesario entre los derechos de los autores y los ciudadanos en esta materia". La Comisión de Propiedad Intelectual será un "punto de encuentro y de resolución de conflictos entre los titulares de los derechos de las obras protegidas y los usuarios de las mismas", y ni que decir tiene, que todo esto para conseguir que "sin cercenar el derecho fundamental a la tutela judicial efectiva, se consiga mitigar el alto nivel de litigiosidad que se registra en el ámbito de la gestión de derechos de autor".
De todo lo anterior se desprende, claramente, que el recién estrenado ministro de cultura sabe hablar muy bien.
Por otro lado, el 4 de septiembre termina el plazo de presentación de enmiendas a la Ley de la Sociedad de la Información, y la aberración consistente en que, sin orden judicial por medio, la SGAE pueda cerrar páginas Web sigue planeando, amenazadoramente, sobre los derechos fundamentales de los españoles.
¿Tan difícil es decir que, de acuerdo con la Constitución, solo el poder judicial puede arrogarse esas facultades? Pues nada, siguen mareando la perdiz hablando de vaguedades y de unas "autoridades competentes", sin definirlas concretamente.
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Es un premio. No hay obligación alguna, por mi parte, de que continues la cadena.
Melhores Momentos Virtuais
Saludos cordiales
...Hablar muy bien y no decir nada. Pues no creas, que eso es un arte, jeje.
Un saludo.
¡Con la SGAE hemos topado!
El poder de convicción que tiene este estamento recaudatorio para con el gobierno, me fascina. ¿Serán brujos?.
Tengo amigos abogados que están hartos de pronunciar la ilegalidad del canon de los CDs y ahora de los
demás aparatos de registro digital.
En cuanto a lo de cerrar páginas web, ya lo han hecho. Ramoncín, el rey del pollo frito, no nos olvidemos de eso, consiguió que cerraran un par de blogs, porque se metían con él.
Saludos cordiales
Dan vergüenza y, a veces, lastima, sobretodo el tal Ramoncin, que no vendió un disco como cantante y ahora quiere hacerse rico a costa nuestra. A la carcel lo mandaba yo.
Saludos.
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